Según un estudio de 2021 de Global Consumer Survey, el 1,5% de las personas encuestadas en España siguió una dieta vegana en 2021, frente al 0,8% que se declararon veganas en la edición anterior de 2019. Este valor ha ido creciendo en los últimos años.
Un aumento similar se puede encontrar en otros países europeos, como Alemania o el Reino Unido, donde el porcentaje de encuestados que se identifican como veganos se estima en un 3,2% en ambos países.
La consultora Laterm publicó un informe titulado “La Revolución Verde“, que también ha ido registrando una tendencia a la baja en el consumo de carne en Europa y el creciente interés por las alternativas a base de plantas. Cuando realizaron este estudio por primera vez en 2017, el número de personas que no comen carne en España era del 7,8%, dividido en un 1,3% de personas vegetarianas, un 0,2% de veganas y un 6,3% de flexitarianas. En 2019, la actualización de Lantern mostró un aumento del 27% en dos años, estableciendo el número de personas vegetarianas en el 1,5%, las veganas en el 0,5% y las flexitarianas en el 7,9%. En el informe recientemente publicado para 2021, el número de personas vegetarianas ha crecido otro 34%, por lo que ahora tenemos un 1,4% de vegetarianas, un 0,8% de veganas y un 10,8% de flexitarianas. Este informe también concluyó que, en España, en los últimos cinco años, el número de restaurantes vegetarianos o veganos se ha duplicado, alcanzando casi 800 establecimientos.
Sin embargo, España sigue siendo un país con un consumo muy elevado de carne. Según datos del Ministerio de Alimentación, Agricultura y Pesca, el consumo medio es de casi 50 kg por persona y año, muy por encima de los 21 kg recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS). No obstante, se constata que su consumo ha caído un 5,6% desde 2012 y el de frutas y verduras ha crecido un 10,5%, como se concluye del último informe sobre Consumo y Alimentación de España, elaborado por el Ministerio de Alimentación, Agricultura y Pesca.